La realidad es cruel con la gente que sufre, les hace creer que no hay nada ni nadie que la haga cambiar...Lastima por aquellos que han decidido creerle, y que alegría por aquellos que todavía siguen pensando todo lo contrario a lo que ella dice!
Para reconocer a un sabio es necesario que otro sea quien lo diga, en cambio el necio solo se reconoce por el alarde que él hace de si mismo...
